En la recolección de datos están involucrados cuatro parámetros según Andre Oboler, Kristopher Wels y Lito Cruz. Estas serían: el tipo de información que las personas pondría a disponibilidad, Las políticas de privacidad que varían entre países creando una dicotomía a la protección de datos, mientras que en algunas ciudades del mundo la gente está más protegida que en otras, como sería el caso de las leyes europeas a contraposición de las leyes de China o Estados Unidos; otros dos parámetros que influyen en la evolución de este proceso serían la habilidad de recolectar datos y su enlace entre información relevante, y un sistema capaz de procesar todo esto. Aquí entraría el peligro hacia los usuarios, ya que no hay un control real sobre las empresas o gobiernos que pueden acceder y controlar esta información, revelando un potencial e inminente daño a la privacidad de las personas. Por eso es realmente importante la transparencia sobre el uso que se le da a esta información para evitar la manipulación de grandes entidades. Un ejemplo sencillo pero bastante claro, sería como la publicidad en las redes sociales o en las páginas web detectan búsquedas recientes y te muestran el producto o productos relacionados. Compartir datos es el futuro de la información, esto conlleva también el riego de la desinformación, y esto daría paso a más noticias falsas y a teorías conspiranóicas; por ello es realmente importante las leyes y políticas hacia este tema tan sensible, ya que los datos deben ser libres a la par de mantener un control de qué datos son de uso público, en específico, a los datos de los individuos para no acosar a la privacidad. Los datos deben usarse para la investigación, la documentación o por simple curiosidad, la información debe ser verídica, libre y gratis para todo el mundo.